Mundo Revés es un proyecto iniciado por dos jóvenes franceses, Quentin y Thibault, que llegaron a la Argentina hace ya diez años.
Ambos descubrieron en Argentina una vitivinicultura y un estilo de vinos muy diferentes a los que estaban acostumbrados en Francia. Encontraron en el terroir argentino un potencial enorme y sintieron que esta era una gran oportunidad para cumplir su sueño (Revés significa “sueño” en francés) en un país fantástico. Luego de haber trabajado por varios años en diferentes bodegas y de haber visitado todos los viñedos de Mendoza, decidieron focalizarse en el Valle de Uco y elaborar allí sus propios vinos. Se encontraron con lugares magníficos (Altamira, Cepillo, Chacayes y Gualtallary, entre otros) para producir vinos especiales a partir de uvas como Bonarda, Cabernet Franc, Semillón, Sauvignon Blanc, Criolla y por supuesto, Malbec.
Los vinos de Mundo Revés son una invitación a viajar entre los viñedos argentinos, su “cultura montañosa” y sus paisajes, pero aún más importante, son una invitación a una travesía interna, para descubrir los vinos argentinos a través de una nueva perspectiva.